miércoles, 7 de octubre de 2009

Apuntes para una historia - El A H1N1 y las embarazadas

JOSÉ A. DE LA OSA

Saymí Fernández Morera, una maestra de San José de las Lajas de 18 años de edad, ingresó con inflamación pulmonar y un embarazo a término hace 22 días en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Nacional de Altahabana. Sin embargo, no guarda recuerdos de lo ocurrido, porque durante ese tiempo se mantuvo entre la vida y la muerte.

Saymí, aún convaleciente, está pletórica de felicidad con el nacimiento de su hija.

"Cuando trato ahora de mirar hacia atrás, dice, solo logro ver a mi mamá lavándome la cabeza, las primeras manifestaciones de una gripe que consideramos común y que achacamos al agua fría utilizada para el lavado, cuando en verdad padecía de influenza A H1N1".

Cinco días habían transcurrido cuando acude a los servicios médicos con dificultades respiratorias, periodo más que suficiente para que el nuevo virus, especialmente agresivo con las gestantes, le originara una insuficiencia respiratoria aguda severa (distrés).

Durante 15 días estuvo respirando Saymí con el apoyo de equipos de ventilación artificial. La doctora Diana Calixto Augier, especialista en Medicina Intensiva y Máster en Urgencias, indica a Granma que este nuevo virus de la influenza produce una reacción inflamatoria pulmonar atípica, "porque lo habitual para nosotros es que se presente con más frecuencia en infecciones bacterianas que virales, y, además, muestra una evolución muy rápida".

 Fotos: Yaimí RaveloCualquier embarazada con el más mínimo síntoma respiratorio, debe ser evaluada por un médico y comenzar de inmediato el tratamiento.

De esa realidad científica surgen las medidas de iniciar temprano los tratamientos, especialmente en las embarazadas, y con mayor urgencia aún las gestantes con enfermedades asociadas de asma, diabetes, hipertensión arterial, cardiopatías, sicklemia.

Aunque el A H1N1 guarda aún muchos secretos para la ciencia, tratamos de inquirir el porqué de esa marcada agresividad con las embarazadas. Como hipótesis que se valoran, el doctor Miguel Serra Valdés, jefe del Servicio de Medicina Interna del Hospital Nacional, se refiere a la composición genética de este virus (con genes humano, aviar y dos porcinos distintos), al crecimiento fisiológico del abdomen lo que por sí mismo les dificulta la respiración, a los cambios hormonales e incluso de la circulación pulmonar y también a la depresión de mecanismos de defensa que se producen en las gestantes.

Son atendidas por un equipo multidisciplinario durante las 24 horas del día.

Para el doctor Omelio Alberto Batista Ávila, jefe del Servicio del Centro de Urgencias de esa institución, cualquier embarazada con el más mínimo síntoma respiratorio, debe ser evaluada por un médico y comenzar de inmediato el tratamiento.

48 HORAS

El Hospital General Docente Enrique Cabrera (popularmente conocido como el Nacional), en Ciudad de La Habana, ante la pandemia de gripe A H1N1 tiene la misión de atender en sus salas y terapias a gestantes con cuadros respiratorios procedentes de Ciudad de La Habana y provincia La Habana (casos graves), que son remitidas a ese centro asistencial o diagnosticadas durante las 24 horas del día por un equipo multidisciplinario de especialistas en el Cuerpo de Guardia. Para el director, el profesor Armando Garrido Berracierto, la experiencia institucional ganada en la atención a estas embarazadas indica que el éxito de la terapéutica radica en comenzarla con los antivirales en las primeras 48 horas de iniciados los síntomas de gripe, lo que evita la aparición de las complicaciones.

El profesor Armando Garrido Berracierto, director del Hospital Nacional.

FOTOS DE FELICIDAD

Narran los especialistas que el primer día de su ingreso hospitalario, y ya en estado de gravedad, un equipo multidisciplinario de competentes profesionales llevaron a Saymí al salón de operaciones para practicarle una cesárea. El martes 15 del pasado mes nacía Natalia Rodríguez, una linda niña con más de siete libras de peso, de la que su madre habla con justo orgullo y encendidos ojos, y a médicos, enfermeros y periodistas nos muestra las fotos que mantiene junto a su corazón. "No la he podido abrazar aún, pero cómo la quiero", dice.

Según los criterios médicos, aunque Saymí está fuera de peligro, deberá permanecer aún varios días en tratamiento hospitalario. Respira ya espontáneamente, con un pequeño suplemento de oxígeno. Cuando le preguntamos si en algo podíamos ayudar, nos solicita que en nuestro diario se agradezca públicamente al menos los nombres de sus médicos más cercanos, los doctores Albadio Pérez Assef, Jorge Díaz Mayo, Silvia Naranjo, Virgilio Cárdenas, María Isabel Caballero, Jorge García y Ramón Pérez Ramírez.

No hay comentarios: