viernes, 12 de febrero de 2010

Realiza ballet folclórico proyecto comunitario en barrios de Camagüey

El ballet folclórico de Camagüey ofreció su música y su baile en la Plaza del Carmen. Un intercambio entre el arte y los pobladores de la comunidad.

Por Aymee Amargós / Televisión Camagüey


Cada movimiento lleno de sensualidad y precisión, mantuvo atenta la mirada de los espectadores durante la presentación del Ballet Folclórico de Camagüey.

Una muestra de su repertorio le dio vida a la Plaza del Carmen y permitió corroborar su elegancia y dominio fuera de los escenarios habituales.

La compañía dirigida por Reinaldo Echemendía combinó ritmos folclóricos y populares cubanos, entregó su arte a la comunidad. Junto a los números tradicionales estuvo el estreno de una rumba.

El programa músico danzario en este espacio alternativo recibió el agradecimiento por parte del público.

Difusor de las más autenticas tradiciones de la región es el ballet Folclórico de Camagüey.

Un conjunto signado por la pasión y la energía.

La melodía de un verso hecho canción

Por Aymee Amargós / Televisión Camagüey

De la poesía y la música nace una pasión que sólo Juan Ramírez Pellerano puede explicar. Maestro de profesión y artista de espíritu, cuenta con una fructífera obra que lo hace sentir, a sus 80 años, aún más seguro del camino que eligió para toda la vida.

Para este escritor la música es el mayor regalo que le ha dado la vida. Aunque no sabe tocar ni siquiera una nota del pentagrama; con sólo escuchar la bella melodía de una composición de Chopin, Bethoven o Frank Liszt, se renueva su inspiración y la hace partícipe de su obra literaria.

En cualquier lugar se le puede encontrar con la mirada desafiante y firme a la vez. Siempre presto a deletrear el nombre de José Martí, atento a cada uno de sus versos, siempre con la esperanza de hacer cómplice a las nuevas generaciones de ese valioso legado.

Escritor de épocas singulares y aciertos de la historia patria. Su obra se resume en la magistral epopeya de un Canto a los héroes, la cubana mezcla de Zafra y poesía, la proeza de un Viet Nam: poesía combatiente y la acertada selección de Cartas a Amalia, cumbre del género epistolar cubano, entre otras obras representativas de la cubanía y síntesis armónica entre el arte y la cultura.

Por iniciativa de Pellerano, como asesor literario, en el mes de julio de 1968 se fundó el taller literario “Rubén Martínez Villena” con el objetivo de que los aficionados camagüeyanos discutieran sus trabajos y estudiaran materiales teóricos relacionados con la literatura y el arte.

Así llegó Juan Ramírez Pellerano a la cita con el arte de escribir y decidió entonces, no abandonar los senderos que lo llevarían a contar con una mayor modestia como creador.

Es hijo Ilustre de la ciudad de Camagüey, más que escritor y poeta, es un hombre entregado en cuerpo y alma a la virtud. El Premio Raúl González de Cascorro y el de la Obra de toda la vida que otorga la UNEAC en Camagüey, de la cual es fundador, lo atestiguan.

Es una distinguida personalidad de la cultura, merecedor de la admiración de las nuevas generaciones y promotor del optimismo de un hombre que no se redime, porque no nació para cantar, pero sí para decir el poema: “Estoy dispuesto siempre”.

La Feria del Libro 2010, expresión de una sociedad socialista

Asistió Raúl a la inauguración en La Cabaña, junto al canciller ruso Serguei Lavrov

Pedro de la Hoz
pedro.hg@granma.cip.cu

Foto: Geovani FernándezEl General de Ejército Raúl Castro Ruz, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, asistió anoche a la inauguración de la XIX Feria Internacional del Libro, en la Fortaleza de La Cabaña, al este de la capital.

La publicación de alrededor de mil títulos y la disponibilidad de siete millones de ejemplares en la XIX Feria Internacional del Libro Cuba 2010 se explican por la prioridad que una Revolución socialista concede a la cultura en un país bloqueado desde hace medio siglo por el imperialismo.

Esa idea, contenida en el discurso preparado por la presidenta del Instituto Cubano del Libro, Zuleica Romay, y que por padecer una afección laríngea leyó Rafael Bernal, viceministro primero de Cultura, ilustró a los asistentes el ingente esfuerzo por satisfacer la demanda de los lectores que durante diez días en La Habana y otras dos semanas en 15 ciudades a lo largo del país protagonizarán estas jornadas.

En representación de Rusia, país Invitado de Honor de la Feria, Serguei Lavrov, ministro de Relaciones Exteriores, agradeció el convite. Entre los asistentes al acto se hallaban, junto a dirigentes del Partido y del Gobierno cubanos, Salvador Sánchez, vicepresidente de El Salvador; Ticio Escobar, ministro de Cultura de Paraguay, y la Premio Nobel de Literatura, la escritora sudafricana Nadine Gordimer.

La calidad de la enseñanza artística se puso de manifiesto mediante la ejecución por la Orquesta Sinfónica Juvenil del conservatorio Amadeo Roldán de exigentes partituras de Dimitri Shostakovich y Piotr Chaikovski. Por parte de la nutrida delegación cultural rusa que concurre al evento, intervino el saxofonista Igor Butman y su quinteto de jazz.

Un buen comienzo

Raúl en la inauguración del Pabellón de Rusia en la Feria

PEDRO DE LA HOZ

pedro.hg@granma.cip.cu

"Este ha sido un buen comienzo", declaró el General de Ejército Raúl Castro al finalizar anoche, en compañía del canciller Serguei Lavrov, el recorrido que dejó inaugurado el Pabellón de Rusia en la Fortaleza de La Cabaña, sede principal de la XIX Feria Internacional del Libro.

Fotos: Geovani FernándezImágenes históricas del Comandante en Jefe Fidel Castro ocupan un lugar prominente en el Pabellón de Rusia.

El Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros de Cuba recibió una amplia información en cada una de las secciones de la muestra del país Invitado de Honor al evento, y auguró una atenta acogida por parte del público cubano a los valiosos y atractivos exponentes.

"Qué rápido han pasado estos últimos cincuenta años", comentó al repasar las imágenes que dan cuenta de las cinco décadas transcurridas desde el restablecimiento de relaciones diplomáticas entre Moscú y La Habana.

Fotografías de los encuentros de Fidel con líderes soviéticos y rusos y del propio Raúl adquieren en la exposición una dimensión histórica. De manera particular se detuvo ante una instantánea que refleja la primera visita de la cosmonauta Valentina Tereshkova a la isla y evocó la amistad que existió entre ella y Vilma.

También se interesó por las ediciones en ruso del pensamiento de Fidel. Como novedad, el Pabellón exhibe, en la sección dedicada a los soportes electrónicos, una ingeniosa edición interactiva de las Reflexiones.

Foto: Yordanka AlmaguerRaúl felicita a María del Carmen Barcia, a quien está dedicada la Feria.

Se cuentan por decenas los títulos de autores cubanos traducidos al ruso y desplegados en los estantes. A Raúl le llamó la atención la edición de la novela El vuelo del gato, de Abel Prieto, y delante del autor explicó a Lavrov el argumento.

En diálogo con el Canciller ruso recordó cómo la literatura épica rusa acompañó a los combatientes que defendieron las conquistas de la Revolución en los tempranos 60, en medio de las agresiones imperialistas.

Títulos como La carretera de Volokolansk, Un hombre de verdad, Somos hombres soviéticos y Los hombres de Panfilov regresaron a la memoria de muchos de los que participaron en el recorrido.

Precisamente al 65 aniversario de la victoria sobre el fascismo, que se conmemorará el próximo mayo, está dedicada una parte del Pabellón, que también incluye muestras de casas editoriales, carteles, libros para niños y jóvenes y exposiciones temáticas sobre Mijail Sholojov, León Tolstoi y Anton Chejov.

En un momento del itinerario, Raúl conversó animadamente con María del Carmen Barcia, Premio Nacional de Ciencias Sociales, que comparte con Reynaldo González los homenajes de esta Feria. "Pudiéramos decir que somos familia", bromeó luego de trazar un paralelismo entre la ascendencia de los progenitores de la historiadora y de los Castro Ruz.

RUSIA Y CUBA UNIDAS EN LA SOLIDARIDAD

Fotos: Geovani FernándezRaúl revisa una publicación periódica que forma parte de la muestra.

Al intervenir en el acto de inauguración de la Feria, Serguei Lavrov resaltó los vínculos históricos entre los pueblos ruso y cubano y subrayó la comunidad de intereses sobre la base de la solidaridad.

Rusia, dijo, figura en la lista de los países que más libros edita, pero remarcó que lo importante no es la cantidad, sino el valor que tengan en la sociedad: "el libro hace al hombre más sabio, más inteligente, adquiere más conocimientos. Por eso Martí dijo que ser culto es la única manera de ser libre".

Los intelectuales cubanos homenajeados agradecieron la dedicatoria. En el caso de María del Carmen Barcia, esta reafirmó su vocación por el magisterio en las aulas universitarias, honró a su vez a los maestros que contribuyeron a su formación, y reiteró su interés por la historia social a la que ha aportado textos de notable valor sobre la esclavitud, las capas populares y la mujer.

Por su parte, Reynaldo González, Premio Nacional de Literatura evocó a José Lezama Lima en su centenario y expresó cómo ante los tiempos cruciales que vive la Patria, los intelectuales "debemos responder con rigor y constancia", como participantes activos de la sociedad.

EXPECTATIVAS ANTE el PROGRAMA ARTÍSTICO

Fotos: Geovani FernándezEl Presidente de los Consejos de estado y de Ministros de Cuba inauguró junto al Canciller ruso Serguei Lavrov el Pabellón del país invitado de honor.

Entretanto entre el público cubano se han generado enormes expectativas ante el programa artístico que propone la delegación rusa.

Ayer mismo comparecieron ante la prensa las estrellas del Bolshoi que compartirán una función única mañana en el teatro Karl Marx con el ballet nacional de Cuba, dirigido por Alicia Alonso.

La compañía rusa se presentó por última vez en La Habana en 1980. "Hemos elegido un repertorio representativo de las composiciones clásicas", comentó por su parte el primer bailarín Vladimir Neporozhny.

Bravo, el nuevo líder

XXXV Vuelta Ciclística

Ariel B. Coya

BAYAMO.— Acogidos al reposo después de la carrera, también es posible escuchar los tambores de guerra en este giro pedalístico. Ya saben: Sudamérica ejerce de líder y todavía ningún cubano ha conseguido dominar una de las tres etapas disputadas.

Foto: Ricardo López HeviaMuchos aguardan el primer triunfo cubano.

El día en que la Vuelta celebró su aniversario 46 otro extranjero sopló las velas sobre el podio. No importó que lloviera fuego del cielo ni tampoco lo accidentado del trayecto. Curtido por el inclemente sol de los llanos del Apure, el venezolano Wilmen Bravo encabezó el arribo del pelotón a Manzanillo, escoltado por su compatriota Miguel Ubeto y el español Joaquín Sobrino (Peugeot), tras 4:38:58 horas. No conforme con portar el jersey rojo de la regularidad ahora lucirá el dorado de líder.

Antes, eso sí, hubo escaramuza en la montaña. Raúl Granjel (CUB) buscó acercar posiciones con Yoel Solensal (SSP) y atacó el primero la cota de Puerto Moya. En tanto, los velocistas desataron la estampida sobre las metas volantes. La selección cubana —según su técnico Cecilio Mera— extremó las precauciones para controlar la carrera en los últimos compases, pero llegó extenuada al sprint definitivo. Uno en el que, según admitió el campeón defensor Arnold Alcolea, se vieron muchos corredores fuertes mientras se aguardan las etapas decisivas de la contrarreloj en Morón y la escalada a Topes de Collante.

El ataque, sin embargo, puede sobrevenir por sorpresa. La caravana parte hoy hacia Holguín, la tierra de Granjel; suenan los tambores de guerra y se fragua la conspiración: 86 kilómetros deben servir para preparar la emboscada. Como se le oyó decir a Alcolea: Hoy irán a por todas. Un cubano, por fin, podría conquistar una etapa de la Vuelta.

Líderes. Clasificación general individual: 1- Wilmen Bravo (VEN/Sumiglov, 11:03:33 horas); 2- Jaime Castañeda (COL, a 4 segundos); 3- Raúl Granjel (CUB, a 11). Montaña: 1- Yoel Solensal (SSP, 17 puntos); 2- Raúl Granjel (CUB, 12); 3- José Alarcón (VEN/Sumiglov, 8). Regularidad: 1- Wilmen Bravo (VEN/Sumiglov, 35 puntos); 2- Miguel Ubeto (VEN, 27); 3- Damián Martínez (GTM, 23).

En tierra haitiana brigada internacional Henry Reeve

Leticia Martínez Hernández

Foto: Juvenal Balán
Enviados especiales

PUERTO PRÍNCIPE, Haití.— Quizás nunca, como en la mañana de ayer, se escuchó con más emoción el nombre del Comandante en Jefe Fidel Castro en el aeropuerto internacional Toussaint Louverture, cuando 50 jóvenes graduados de la Escuela Latinoamericana de Medicina pusieron pie en la sufrida tierra haitiana. Se trataba del primer grupo de los más de 200 médicos, que ya están en La Habana y se irán sumando paulatinamente a la brigada cubana aquí.

Antes de partir hacia Croiax des Buquet, donde los esperaban un hospital de campaña y cientos de enfermos, algunos de estos muchachos conversaron con Granma. Cuenta la peruana Dania Lazo que estaba en Cuba cursando la especialidad de Médico General Integral cuando escuchó de la propuesta del Comandante en Jefe, no dudó entonces en dar el sí, y ahora solo sabe que vino a ayudar; no tiene idea, ni mucho le preocupa, el día del regreso.

Dice el argentino Emiliano Mariscal, al frente de este primer contingente, que vinieron a hacer lo que durante años le enseñaron en Cuba, a dar salud y mucho amor. "Estamos orgullosos de ser nosotros quienes comencemos esta tarea, llegamos felices y con un montón de ganas de trabajar". Mientras, el médico hondureño Luther Castillo ondea la bandera que le confiaron allá en La Habana, y comenta que tienen cinco grupos listos para venir, y todos traerán sus mochilas llenas de solidaridad.

El profesor Eladio Barcácel, asesor del rector de la ELAM, explicó que en el grupo de doctores, provenientes de más de una veintena de países, vienen algunos muchachos que están haciendo ya el tercer año de la segunda especialidad. Y aunque en los primeros momentos apoyarán la atención primaria de salud, estarán el tiempo que haga falta y harán todo lo que tengan que hacer.

El entusiasmo de los rostros jóvenes del nuevo contingente de la Brigada Médica Internacional Henry Reeve, así lo confirma.

La única solución posible a la crisis ambiental

El llamado de Hervé Kempf dista de ser una voz solitaria en el desierto. Los oídos tendrán que abrirse siempre a lo que ya dijo Fidel en 1992

PEDRO DE LA HOZ
pedro.hg@granma.cip.cu

El discurso pronunciado por el presidente venezolano Hugo Chávez en la cumbre de Copenhague en diciembre pasado hizo que muchos advirtieran la presencia, entre los enviados especiales de los medios de comunicación, de un escritor y periodista francés que durante los últimos años ha venido publicando artículos y libros sobre las causas del deterioro ambiental y la necesidad de hallar prontas soluciones.

Chávez citó la introducción que Hervé Kempf situó al frente de su libro Cómo los ricos destruyen el planeta, publicado originalmente por la casa Seuil en el 2007, y que cuenta con decenas de miles de ejemplares traducidos a varias lenguas: "No podremos reducir el consumo material a nivel global si no hacemos que los poderosos bajen varios escalones, y si no combatimos la desigualdad; es necesario que al principio ecologista, tan útil a la hora de tomar conciencia: pensar globalmente y actuar localmente, le sumemos el principio que impone la situación: consumir menos y repartir mejor". El mandatario venezolano acotó intencionadamente, y dirigiéndose a quienes hicieron lo posible y hasta lo imposible por diluir los propósitos de la Cumbre: "Creo que es un buen consejo el que nos da este escritor francés".

En los reportes de Kempf para el diario Le Monde sobre la Cumbre, este lamentó la escasa transparencia de la fase final del proceso de negociaciones; la falta de compromiso real de los principales líderes europeos, más preocupados por las agendas políticas domésticas que por clarificar los resultados de la cita; y la postergación de las demandas de los movimientos sociales que se manifestaron paralelamente al cónclave.

Concluyó con palabras inequívocas: "Durante la conferencia, Europa, de facto, se alineó con la posición de Estados Unidos". Pero llamó la atención sobre la creciente pujanza de estos últimos, de manera tal que no podrán ser ignorados.

Si se sigue la trayectoria de Kempf, saltará a la vista cómo en el curso de los últimos 20 años ha evolucionado su postura desde la simpatía por los pronunciamientos ecologistas hasta una comprensión radical del vínculo entre crisis ambiental y hegemonía imperial.

Al suceso del libro citado por Chávez siguió en el 2009 un ensayo que ya desde el título resulta sumamente revelador: Para salvar el planeta, salir del capitalismo.

Entrevistado sobre la proyección de este nuevo aporte, el escritor habló claramente de la relación intrínseca entre el sistema, sus mecanismos para ejercer la hegemonía ideológica y la catástrofe ambiental a la que estamos abocados.

"La oligarquía mantiene un modelo cultural de hiperconsumo que difunde al conjunto de la sociedad a través de la televisión, la publicidad, las películas. Ese modelo tiene que cambiar, pero está tan arraigado en la manera de vivir de la oligarquía con su enorme acumulación de riquezas que esta se opone a esos cambios. Un millonario nunca aceptará andar en bicicleta porque su modelo, su poder, su prestigio, es el auto caro. Si queremos atenuar la crisis ecológica, ese es el modelo que debemos romper. Es necesario reducir el consumo material y el consumo de energía. Estamos entonces en plena confrontación entre la ecología y la justicia, por un lado, y por el otro, una representación del mundo totalmente inadaptada a los desafíos de nuestra época".

A Kempf le parece insuficiente la mera descripción de un deplorable estado de cosas: necesitaba subrayar cómo detrás de las evidencias —crecimiento exponencial de las emisiones de carbono, incremento de la desertificación, reducción de las fuentes de agua potable, aumento del agujero de la capa de ozono, desaparición de especies endémicas, calentamiento global, estrechamiento de franjas forestales—, se hallaba una cuestión de fondo: la esencia misma del capitalismo.

Habría que recordar cómo el 12 de junio de 1992, una voz premonitoria se elevó en Río de Janeiro, durante la llamada Cumbre de la Tierra. Fue la del Comandante en Jefe Fidel Castro, quien puso los puntos sobre las íes cuando el grave problema todavía no se había desencadenado en la magnitud que hoy conocemos y prácticamente nadie alcanzaba a penetrar con lucidez en una perversa trama vinculante.

"Una importante especie biológica está en riesgo de desaparecer por la rápida y progresiva liquidación de sus condiciones naturales de vida: el hombre. Ahora tomamos conciencia de este problema cuando casi es tarde para impedirlo. Es necesario señalar que las sociedades de consumo son las responsables fundamentales de la atroz destrucción del medio ambiente. Ellas nacieron de las antiguas metrópolis coloniales y de políticas imperiales que, a su vez, engendraron el atraso y la pobreza que hoy azotan a la inmensa mayoría de la Humanidad. Con solo el 20% de la población mundial, ellas consumen las dos terceras partes de la energía que se produce en el mundo. Han envenenado el aire, han debilitado y perforado la capa de ozono, han saturado la atmósfera de gases que alteran las condiciones climáticas con efectos catastróficos que ya empezamos a padecer.

"( ... )

Si se quiere salvar a la Humanidad de esa autodestrucción, hay que distribuir mejor las riquezas y las tecnologías disponibles en el planeta. Menos lujo y menos despilfarro en unos pocos países para que haya menos pobreza y menos hambre en gran parte de la Tierra. No más transferencias al Tercer Mundo de estilos de vida y hábitos de consumo que arruinan el medio ambiente. Hágase más racional la vida humana. Aplíquese un orden económico internacional justo. Utilícese toda la ciencia necesaria para el desarrollo sostenido sin contaminación. Páguese la deuda ecológica y no la deuda externa. Desaparezca el hambre y no el Hombre."

Las verdades incontestables y los reclamos ineludibles de Fidel acrecientan su vigencia.