Por María Antonia Borroto Trujillo / Televisión Camagüey
“La Liga” es un proyecto muy joven y a pesar de eso, ya tiene un trecho andado. Puede parecer una paradoja, mas la seriedad con que ha sido asumido el proyecto por sus gestores hace que en muy breve tiempo sean cinco los números publicados, varios los intelectuales cubanos y extranjeros que integran la nómina de sus colaboradores y que hayan menudeado sus presentaciones en múltiples espacios, dentro y fuera de Camagüey.
Veamos a correr de pluma el contenido del quinto número de la publicación de literatura y arte que dirige Lionel Valdivia, secundado por un entusiasta grupo de escritores agramontinos, a quienes se une Luis Omar Álvarez, el diseñador.
El editorial mantiene la que ha sido su tónica desde la segunda vez: cada uno de los integrantes del Consejo de Redacción mira desde su personalísima perspectiva un asunto de la realidad. El texto resultante es una suerte de cadáver exquisito que llama la atención sobre las confluencias de este grupo. Esta vez, a Osvaldo Gallardo, Yoan Manuel Pico, el propio Lionel y quien esto escribe se unió Obdulio Fenelo para dejar constancia de la muerte de Michael Jackson, no ya de los entretelones que rodearon el hecho sino de sus repercusiones en la sensibilidad de cada cual.
“El laberinto” incluye un texto mío: se trata del ensayo “El modernismo: cuestión de ideas”, tomado del libro homónimo que obtuviera el Premio Razón de Ser. También de un libro premiado es el cuento publicado en “La colmena”. Se trata de “La mujer que compró el mundo”, del volumen “Ne me quitte pas”, de Legna Rodríguez Iglesias, Premio Calendario 2009.
La sección de poesía, denominada “Hojas al viento” como homenaje a ese grande que es Julián del Casal, propone esta vez versos de Mirtha Yáñez; mientras que “Lectura en dos orillas” nos depara una deliciosa plática sostenida por Lionel Valdivia con Ciro Bianchi. ¿El asunto? Pues los múltiples hilos que unen la historia y el periodismo, así como el inveterado placer de contar historias.
Sobre los entresijos del proceso de audiovisión, tan consustancial a estos tiempos, signados por el predominio de la imagen audiovisual, trata el análisis del profesor Rafael Rojas Bez incluido en “El filtro”. Por su parte, “La hornilla” se detiene en el universo de la danza, gracias al texto de Yailín Ortiz Clavería “José Antonio Chávez: Un elegido de Terpsícore”.
“La celosía”, nacida de ese afán de fisgonear en libros y autores, nos aproxima a textos de Kafka, Carlo Fabretti y Jordi Sierra i Fabra. Se privilegia el espacio con la personal mirada a propósito de “Abdala”, debida al doctor Pedro Pablo Rodríguez, quien dirige la edición crítica de las obras de José Martí, a propósito de “Abdala”.
El espacio dedicado al palpitar de estos tiempos, o sea, “La vida pública” estrena un nuevo diseño y viene muy bien surtido. Yoan Manuel Pico deja constancia de varios sucesos: los conciertos de la Camerata Romeu, José María Vitier y Carlos Varela, actuaciones de Camagüey Endedans y del estreno de “Huevos” de Ulises Rodríguez a cargo de Mefisto Teatro. Heidi Cepero, quien anduvo por el Cubadisco se detiene en algunos de sus momentos mientras que yo dialogo con Yoan a propósito del concierto de la Camerata y me detengo en lo triste que es que Camagüey no tenga una confortable sala de conciertos.
Gustavo Pérez confiere otros tintes a La Paleta, nuestra galería virtual, gracias a sus apuntes de Lisboa y sus secuencias de Bélgica, se redondea así el afán cosmopolita que también nos anima.
Pero más que eso es afán de la revista La Liga, proyecto de la Asociación Hermanos Saíz en Camagüey el diálogo con la cultura en su sentido más amplio. Si usted quiere sumarse pues solo tiene que visitar el sitio web de cultura en esta provincia, www.pprincipe.cult.cu, y una vez allí, buscar La Liga en el apartado de revistas. Solo un par de clics para asomarse a un mundo que, firmemente anclado en la tradición de la cultura cubana, dialoga con estos tiempos.
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