Ariel B. Coya
Justo como sucediera un año atrás en los Juegos Olímpicos, Yanet Bermoy dio a Cuba su primera medalla en el Campeonato Mundial de judo, al conquistar otro subtítulo, ahora en la división de los 52 kg.
Yanet Bermoy sumó su tercera presea en certámenes del orbe.
En la ciudad holandesa de Rotterdam, la cienfueguera de 21 años siguió sin defraudar en las grandes citas al ceder únicamente en la final contra la japonesa Misato Nakamura, bronce en Beijing’08, que se impuso por wazari para restaurar la hegemonía de su país en esa categoría una década después.
Así y todo, la cubana se mostró feliz de haber ganado una presea en su primer certamen del orbe, tras abandonar los 48 kg donde se había consagrado monarca y subcampeona en El Cairo’05 y Rio de Janeiro’07, por ese orden. "Era muy difícil mantener el peso, pero ya no tengo ningún problema", afirmó al respecto para el sitio web del torneo.
En el Palacio de los Deportes Ahoy, Bermoy abrió con éxito por ippon sobre la belga Ilse Heylen, para luego vencer por yuko a la brasileña Erika Miranda, a la mongola Bundmaa Munkhbaatar y a la alemana Romy Tarangul, frente a la cual —reveló— tuvo esta vez su combate más difícil en semifinales. El otro bronce quedó en poder de la española Ana Carrascosa.
Lamentablemente, la otra cubana en competencia durante esta segunda fecha, Yurisleidis Lupetey, no pudo prosperar en los 57 kg. Tras derrotar por ippon a la haitiana Ange Marcie Jean Baptiste en su primera salida, cayó por wazari ante la francesa Morgane Ribout, quien a la postre se alzó con la corona frente a la portuguesa Telma Monteiro, quedando el tercer escaño para la azerbaiyana Kifayat Gasimova y la húngara Hedvig Karakas.
Ya en el único resultado entre los hombres, el sudcoreano Ki-Chun Wang retuvo su título en los 73 kg ante su par Chol Su Kim, de la República Popular Democrática de Corea; mientras el belga Dirk Van Tichelt y el ruso Mansur Isaev se colgaron los bronces. Para hoy toca aguardar entonces el estreno mundialista de la joven Yaritza Abel, quien sucede en los 63 kg a la legendaria Driulis González. Eso y lo que ocurra en los 81 kg para varones.
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