lunes, 26 de julio de 2010

Moncada y 26 Eternos inspiradores

Por: María Elena Javier / Televisión Camagüey

Obras sociales en Santa Cruz del SurLa gesta de julio de mil 953 quedó guardada como hito en la historia y legó su impronta a los hijos de la tierra antillana. El Moncada estimuló el reinicio de la lucha por la soberanía nacional hasta el colofón rebelde de mil 959.

La intrepidez de aquellos jóvenes se refleja hoy en cada cubano digno y deseoso de encumbrar victorias.

Por eso el 26 convoca y es punto de partida hacia metas sociales. Los que viven en el también Santa Cruz legendario llegaron inspirados en el amanecer dominical del 25 de julio, vísperas de la mañana de la Santa Ana, inspirados y motivados por el sorprendente suceso de Artemisa en el que Fidel alzó su sabia verdeolivo para congratular en ocasión de la fecha moncadista y hacer tributo a sus legendarios compañeros de lucha.

Sucedieron entonces nuevas entregas. El batey candidense, donde ya no se escucha el pito del central, recibió una buena nueva: la electrificación que por años dependía del antiguo ingenio y que ya reportaba bajos voltajes, fue conectada al Sistema Electroenergético Nacional y ahora los vecinos disfrutan de mejor servicio gracias al empeño de obreros de la Organización Básica Eléctrica y del Ministerio del Azúcar en Cándido González, donde la gratitud y el reconocimiento fueron justo allí, en el sitio histórico, en el que un Moncadista llamado Fidel Castro se dirigió a los azucareros en febrero de MIL 996.

En un lugar especializado para la producción de alimentos funcionan dos nuevas máquinas españolas de pivote central, que custodian el riego de tierras cultivadas de frijoles y maíz, que se traduce en comida para el pueblo.

En La Granjita, nombre del lugar productor de alimentos, trabajarán más de cien hombres que pueden defender la tarea diaria con el mismo brío de quienes estuvieron a la vanguardia el 26 de julio. Ellos vencieron y estos de ahora también pueden triunfar aunque el combate esta vez tiene que ser contra la vagancia y el mal gusto para hacer producir la tierra. Resulta que como ayer, la pelea de hoy es también cuestión de Seguridad Nacional, por eso la emulación socialista que enarbola la bandera roja y negra sigue adelante, aunque en momentos difíciles, porque los que libran la batalla actual no cesarán hasta la victoria de cada Moncada y cada 26.

No hay comentarios: