TEGUCIGALPA, 12 de agosto.— Fuerzas antimotines de Honduras atacaron hoy una manifestación de la resistencia antigolpista en el centro de la capital, con saldo aún desconocido de heridos y detenidos.
Entre los arrestados se encuentra el diputado Marvin Ponce, del Partido Unificación Democrática, quien fue fuertemente golpeado, denunció a Prensa Latina el dirigente campesino Rafael Alegría.
Los incidentes se desataron alrededor de las 13:30 horas en las cercanías del Congreso, en una estrecha calle hasta donde había llegado la cabeza de una marcha de miles de personas para demandar la restitución del estado de derecho.
Los antimotines salieron de los bajos del palacio legislativo y dispararon granadas de gases lacrimógenos contra la multitud, que corrió hacia el parque central y por las callejuelas del centro histórico de la ciudad.
Los agentes avanzaron hacia los manifestantes y lanzaron gran cantidad de granadas lacrimógenas, dos de las cuales cayeron en el monumento al prócer nacional Francisco Morazán.
Ante la intensificación de la resistencia popular, el gobierno de facto volvió a implantar el toque de queda.
VETAN LEGALIDAD A ELECCIONES
TEGUCIGALPA, 12 de agosto.— El Frente Nacional contra el Golpe de Estado en Honduras denunció nuevamente la ilegalidad del proceso electoral que transcurre hoy en el país avalado por el gobierno de facto, informó PL.
Para las organizaciones sociales agrupadas en la lucha contra el régimen de Roberto Micheletti, en las actuales condiciones el proceso resulta desnaturalizado por la expulsión violenta del presidente constitucional Manuel Zelaya de su cargo.
La restitución de Zelaya, indica el movimiento popular, es el único medio de validar los resultados que se obtengan (en los sufragios), con la observación y el reconocimiento de la comunidad mundial.
El candidato presidencial del Partido Unificación Democrática de Honduras, el diputado César Ham, exhortó a la unidad en las urnas a fin de derrotar a los golpistas, y dijo estar dispuesto a renunciar a su candidatura en aras de lograr ese objetivo.
Por su postura en torno al complot que depuso a Zelaya, muchos hondureños califican de golpistas a los aspirantes presidenciales por los partidos Liberal y Nacional, Elvin Santos y Porfirio Lobo, respectivamente.
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