martes, 7 de abril de 2009

Este riñón no es mío

Por: Rosa Blanco Ramos

Conocí a Aldo Castillo en la cabina telefónica en las afueras del centro de nefrología de Camagüey. Iba acompañado de su esposa .Nada en él delataba su nuevo riñón.

La médico veterinaria de la localidad de Guáimaro María Isabel Campos, si estaba en su cama. Llevaba pocas horas de haber recibido un riñón.

Llegué al Centro de Nefrología de la ciudad de Camaguey en busca de de la Doctora Yadira Velazco Oiz, Especialista de Primer Grado en Nefrología .La imaginaba una señora entrada en años.

Desde el año 1978 a hoy, Día Mundial de la Salud, solamente en Camaguey se han realizado 467 trasplantes renales. Dos de ellos a Aldo y María Isabel, la veterinaria.

Según ellos, sentían como la vida se les escapaba poco a poco .Las funciones del riñón son vitales en el organismo humano .Muchas de las personas con padecimientos renales pasan años en espera de que puedan entrar al quirófano, en esa espera, tres veces por semana, reciben hemodiálisis.
Solamente en Camaguey, 122 personas precisan de este tratamiento .Se calcula que cada hemodiálisis pudiera costar 90 dólares .De más está decir que en Cuba, toda la salud pública es absolutamente gratis .Imaginar este costoso tratamiento en muchos lugares de países pobres es puro sueño.

Por eso ni me molesto en preguntarle al carpintero Pablo cuánto le costó su nuevo riñón.
Me cuenta que hasta hace dos meses, no tenía sudoración alguna y que hasta la coloración de la piel le cambió. Yo no podía de caminar…cuenta este hombre de apenas 45 años

En Cuba existe un programa nacional para el tratamiento de personas con padecimientos renales crónicos y el estado adopta medidas en el sistema primario de salud porque los estudios poblacionales indican que el número se elevará, toda vez que la hipertensión arterial y la diabetes, son algunas de las causas que la provocan y la población cubana envejece cada vez más.

La doctora Yadira y su equipo de trabajo, sienten orgullo de lo que hacen. Ella se formó como médico en las aulas del Instituto de Ciencias Médicas de Camaguey, a pocos metros del flamante centro de trasplantes renales que ahora dirige.

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