jueves, 22 de enero de 2009

Fidel cerró con broche de oro mi visita a Cuba

Afirmó Cristina Fernández. Acudió Raúl a despedirla

Deisy Francis Mexidor
Francis_mexidor@granma.cip.cu

Foto: Jorge Luis GonzálezEl General de Ejército Raúl Castro Ruz, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, despidió en la tarde de ayer, al pie de la escalerilla del avión, a Cristina Fernández de Kirchner, mandataria de Argentina al concluir una visita oficial de tres días a la Isla.

Bajo un cielo nublado que amenazaba lluvia y una temperatura relativamente baja, la prensa nacional y extranjera esperó apostada en la losa del aeropuerto internacional José Martí la partida de la ilustre huésped, quien, antes de abordar la aeronave que la conduciría a Caracas, Venezuela, se dirigió a los periodistas.

A una pregunta de Granma sobre el saldo de su estancia aquí dijo que se iba "muy contenta" y que "no podía terminar mejor mi visita a Cuba que con una entrevista con el Comandante Fidel Castro Ruz".

Visiblemente emocionada, la jefa de Estado explicó que pudieron charlar y departir. "Lo vi muy bien", acotó.

Apuntó que Fidel le comentó que había seguido muy atentamente la asunción del presidente Barack Obama.

También, precisó "hicimos un repaso por todo lo que es la política de la región, por supuesto hablamos obviamente de las relaciones argentino-cubanas. La verdad que es un broche de oro para mi visita a Cuba".

Tras despedir a la Presidenta argentina, Raúl dialogó con los periodistas. Sobre la insistencia de la prensa extranjera en torno a la salud de nuestro Comandante en Jefe señaló: "Estuvo buen rato con la Presidenta, muy bueno. Está haciendo sus ejercicios, pensando mucho, leyendo mucho, asesorándome a mí y ayudando".

En respuesta a nuestro diario sobre la visita a la mayor de las Antillas de varios mandatarios latinoamericanos en el actual contexto internacional señaló que evidencia el apoyo a Cuba.

Más adelante acotó a una última pregunta de otro reportero que el resultado de la estancia de Cristina Fernández de Kirchner fue "magnífica en todos los sentidos".

EN LA ESCUELA LATINOAMERICANA

La Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM) es una muestra de ese palpitar de la región por una nueva realidad, "un testimonio más del proyecto colectivo que impulsamos", dijo a la prensa la dignataria argentina Cristina Fernández de Kirchner, quien junto al General de Ejército Raúl Castro Ruz llegó a la institución, horas antes de concluir su visita a Cuba.

El entusiasmo con que fueron recibidos por una representación de los más de 800 jóvenes argentinos que se preparan en la Isla prometía un jubiloso encuentro. Y así ocurrió.

Después de un intercambio con Juan Carrizo, Rector de la ELAM, el anfiteatro de la escuela se colmó de aplausos y ritmos latinoamericanos.

Allí, en nombre de los becarios, el estudiante Camilo Zenón dio la bienvenida oficial a los mandatarios.

Fernández de Kirchner correspondió el gesto con palabras: "En esta época de postmodernidad, de vanidades mediáticas, de discursos sin ideas de futuro, la presencia de ustedes aquí nos dice que las cosas están cambiando.

"Quiero agradecer a Cuba, en nombre de estos jóvenes, de sus familias, y del pueblo de Argentina por este esfuerzo, que más que darle la posibilidad de acceder al conocimiento, es un ejercicio de integración latinoamericana", señaló la Presidenta.

Además convocó a los estudiantes a continuar trabajando "y pensar siempre en el otro, que es la clave para formar parte de este proceso colectivo".

Durante el acto, al que asistieron también José Ramón Balaguer, miembro del Buró Político y ministro de Salud Pública; José Miyar Barrueco, secretario del Consejo de Estado, y Yiliam Jiménez, viceministra del MINREX, entre otros invitados, la mandataria recibió una bata de médico y un estetoscopio, como símbolo, según dijeron los futuros doctores, del compromiso que tienen de contribuir con los cambios al sector de la salud que se gestan en su país.

Al finalizar la ceremonia, con abrazos para Cristina y Raúl, los jóvenes lograron dilatar el intercambio. Entre anécdotas del Che y sonrisas concluyó el emotivo encuentro.

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