Camagüey desempeñó un rol importante a lo largo de más de cien años de lucha y junto a su aporte heroico en las guerras de independencia contra España, se destaca la valiosa colaboración de los camagüeyanos en la última etapa de lucha por la definitiva liberación.
Como digno heredero, el Frente Camagüey, fundado el 18 de noviembre de 1958 en cumplimiento de la estrategia de Fidel para esa etapa de la guerra, contribuyó a unificar las fuerzas revolucionarias y al derrumbe definitivo de la oprobiosa tiranía batistiana cuarenta y tres días después de su creación.
Najasa fue escogido por su ubicación idónea en el centro sur de la provincia, al contar con topografía serrana y de montes adecuados para las acciones combativas y un ambiente sico-social que reunía las posibilidades objetivas para apoyar a las fuerzas rebeldes.
A los pobladores de entonces les afectaban entre otros males comunes la insalubridad, el analfabetismo y la falta de camino, generados por la seudorrepública corrupta y agonizante.
Los lugareños también se sabían habitantes de un territorio donde las fuerzas mambisas al mando de Agramonte, Gómez y Maceo escribieron páginas gloriosas como las de La Sacra, El Naranjo y Mojacasabe.
El mayor hospital de campaña de Rosa Castellanos en la Sierra del Chorrillo, el Cuartel de la República en Armas en el Ciego de Najasa, el campamento y talleres de armas de El Mayor y el Himno Invasor escrito por el poeta mambí camagüeyano Enrique Loynaz del Castillo, el 15 de noviembre de 1895, engrosan la rica historia que atesora el territorio de Najasa
Con las glorias mencionadas y otras banderas de aliento, la constitución del Frente Camaguey hace 50 años, fue como escuchar de nuevo en esas tierras el clarín mambí tocando a degüello, esta vez por la definitiva independencia.
Todos los esfuerzos y la sangre derramada contribuyeron a que Najasa, nacido como municipio con la división político administrativa, prospere gracias a la Revolución con el Partido Comunista de Cuba, Fidel y Raúl al frente y unido a la dedicación de los más de 16 mil habitantes actuales, en los 901 kilómetros del territorio.
Ahora junto a los demás camagüeyanos, los najasenses se recuperan de los dos eventos meteorológicos que afectaron el fondo habitacional e instituciones médicas, educacionales y otras que conforman la materialización de los ideales que animaron las gestas del Moncada, el Granma , la Sierra y el Llano.
Gracias a la vigencia del ideario revolucionario, también humildes camagüeyanos han secundado con el ejemplo y la vida en otras tierras, el legado internacionalista de Gómez, el Inglesito y el Che.
Por estos días de adversidades en los predios de Agramonte y de Guillén cabalgan briosas ideas, levantando el ánimo y fortaleciendo la voluntad; entre ellas las de Martí cuando sentenció: “El lamento es de ruines cuando está enfrente la obra”.
Las notas gloriosas del Himno Invasor nacido en la tierra fundacional del Frente Camaguey convocan: Con la vergüenza de los que apostaron y dieron todo, por un país de justicia para un pueblo heroico. ¡Camagüey legendario avanzad!
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