domingo, 31 de mayo de 2009

Alertas con el virus AH1N1 . Puede deparar sorpresas

José A. de la Osa

delaosa@granma.cip.cu

Las cifras mostraban ayer que la influenza AH1N1 alcanzaba 60 países, con 16 799 casos y 113 fallecidos (0,7%), por lo que expertos consideran que "hasta ahora" no es tan alta la letalidad del virus como inicialmente se consideró y también cuando se establece la comparación con la mortalidad que origina cada año la gripe estacional.

"Pero este nuevo virus constituye una incógnita y puede depararnos sorpresas impredecibles, porque atendiendo al gran volumen poblacional que viene afectando puede sufrir mutaciones y ocasionar cuadros de la enfermedad más severos", aseguró a Granma el doctor Manuel Santín Peña, director nacional de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública.

La OMS mantiene la actual fase de "alerta de pandemia", y si se cumplen sus pronósticos de que un 35% de la población mundial padecería la gripe AH1N1 al carecer de inmunidad —alrededor de 2 000 millones de personas—, el número de fallecidos sería elevado incluso con una baja letalidad.

Los estudios epidemiológicos indican que, por cada nuevo caso de gripe, entre sus contactos más estrechos se contagian unas dos personas, cifra que podría elevarse si no se adoptan medidas estrictas de prevención para evitar el virus que promedia un periodo de incubación de tres a diez días, con manifestaciones generales bien conocidas: cuadro gripal, con fiebre en un 80-90% de los pacientes, tos, dolor de cabeza, musculares y articulares, y también de garganta, rinorrea (secreción por la nariz) y a veces vómitos y diarreas.

La temprana, activa y enérgica vigilancia epidemiológica establecida por Cuba en nuestras fronteras ha permitido hasta el momento la contención o detección oportuna de viajeros con la enfermedad.

El doctor Santín, especialista en Administración de Salud y también en Epidemiología, puso como ejemplo el más reciente trabajo realizado con el cuarto caso de influenza AH1N1 registrado en el país, el niño canadiense que arribó a Cuba con sus padres y que ya fue dado de alta hospitalaria. A las 119 personas que tuvieron una relación estrecha con el niño, incluidos la enfermera y el médico del consultorio donde fue diagnosticado y los especialistas que le brindaron asistencia hospitalaria, fueron sometidos a una rigurosa vigilancia epidemiológica.

Recientemente, refirió Santín, en una escuela con alumnos internos de Ciudad de La Habana se reportó un brote de gripe y de inmediato se adoptaron las medidas de vigilancia epidemiológica, de aislamiento y control hasta que fue descartada la presencia del virus A H1N1.

El país dispone de una batería diagnóstica que permite la detección de 23 tipos diferentes de virus que causan cuadros respiratorios.

Hasta el presente el sistema de salud ha investigado en los laboratorios de Virología 210 casos sospechosos, con un total de 1 349 contactos estudiados, con el resultado de cuatro casos positivos: los tres estudiantes mexicanos en Jagüey Grande y el niño canadiense.

Los trabajadores que se desempeñan en sectores vinculados con grandes grupos poblacionales, como el educacional o el de deportes, resultan clave en su apoyo para la detección temprana de personas con sintomatología respiratoria, a fin de establecer la atención médica y el diagnóstico oportunos e im-pedir así la proliferación de la enfermedad.

En estas acciones de pesquisaje vienen colaborando muy activamente los trabajadores en general de diversos organismos e instituciones, y citó entre otros los de aeropuertos, los puertos, las marinas y los vinculados a la red hotelera, que han recibido entrenamiento en la detección y alerta de viajeros con síntomas.

Según predicciones, el riesgo de pandemia global, o la pandemia misma, se mantendrá durante algún tiempo, por lo que nuestro país continuará fortaleciendo y perfeccionando las medidas de vigilancia y acción ante cada caso sospechoso.

Cuba está en capacidad de evitar una epidemia generalizada de la gripe AH1N1, aseguró el doctor Santín, pero ello dependerá también del rigor con que cada ciudadano asuma sus responsabilidades como abanderado de la higiene personal y colectiva. Es un deber actual en beneficio de la salud de todos.

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