Esto es el resultado de una serie de conversaciones con líderes y gobernantes de varios estados que han mostrado interés de que la crisis de Honduras tenga una salida inmediata, dijo el mandatario en rueda de prensa anoche en el Palacio Nacional.
Zelaya llegará a la capital dominicana este domingo, su segunda visita después de haber sido depuesto por un golpe de estado en junio pasado, y Lobo lo hará el lunes, para iniciar un diálogo político directo, según Fernández.
Los primeros contactos serán por separado con Zelaya el domingo y, el lunes, con Lobo, para después pasar a las conversaciones entre ambos, precisó Fernández quien informó haber conversado por teléfono con ambas partes.
A principios de esta semana fuentes oficiosas anunciaron que Lobo sería recibido por el mandatario dominicano durante un periplo para abrirse puertas que abarcaba a varios estados latinoamericanos, pero horas después se retractó.
Medios legislativos dominicanos se mostraron adversos a la visita, entre ellos el presidente de la Cámara de Diputados, Julio César Valentín, quien dijo a la prensa que él no recibiría a Lobo, pero reconoció el derecho de Fernández a hacerlo.
El presidente dominicano dijo que no espera dificultades para que Zelaya salga de la embajada de Brasil en su país, en la que se encuentra hace varias semanas.
Durante su conversación con la prensa, a la que fueron citados los medios locales, Fernández se abstuvo de aludir a Roberto Micheletti, cabeza visible del golpe contra Zelaya.
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